Hoy más que nunca es fundamental mantenerse saludable en la oficina, un espacio en el que invertimos un gran porcentaje de horas de nuestra vida y que requiere que apliquemos una serie de directrices para no caer en problemas como el estrés, la ansiedad, el sedentarismo, las dolencias musculares o las molestias cervicales. Por eso, conocer algunos trucos para mantenerse saludable en el trabajo puede marcar la diferencia. Todos ellos abundan en la sociedad actual, llegando a cronificarse, constituyendo motivos recurrentes de baja laboral que, además, merman la satisfacción y la motivación de los trabajadores.
En esta guía, te vamos a mostrar unos trucos para mantenerse saludable en el trabajo. Está dividida en dos partes, te contaremos todas las claves que debes tener en cuenta para mejorar tu salud en la oficina cambiando algunas pautas de tu estilo de vida que incluyen alimentación saludable, ejercicio físico, rutinas de sueño y descanso apropiadas y optimización de tu espacio de trabajo. Un buen principio es contar con una silla ergonómica, un buen equipo informático y una oficina con las condiciones adecuadas de luminosidad, temperatura, flexibilidad y ocio saludable para los empleados.
En esta primera parte de la guía nos centraremos en el aspecto de la alimentación, el deporte y los programas de bienestar en el seno de la empresa.
Consejos de salud para los trabajadores en la oficina
Los siguientes aspectos deben estar incluidos en el programa de bienestar de la compañía, una iniciativa que gana peso y adeptos en las entrañas de numerosas empresas actuales. ¡Toma nota!
- Apostar por la alimentación saludable: Para ello, las compañías deben facilitar a los trabajadores diversas alternativas que redunden en una dieta completa y que contenga todos los nutrientes esenciales como vitaminas, minerales o fibra. Es recomendable incluir productos frescos y ecológicos como la fruta en el programa de bienestar de la compañía o sustituir las tradicionales máquinas expendedoras de snacks industriales por aperitivos sanos. Un estudio elaborado por la Universidad de Minnesota revela que un entorno laboral saludable reduce notablemente las probabilidades de obesidad en los trabajadores.
- Formación y concienciación: Las charlas, talleres e iniciativas de alimentación saludable son una herramienta muy poderosa en el seno de las empresas para implantar nuevos hábitos de vida centrados en el autocuidado, la mejora física y la productividad.
- Adiós a la comida basura: Es muy importante darles a los trabajadores la posibilidad de cocinar o instarlos a planificar un menú semanal y llevar un tupper saludable para la hora de comer, así como promover la hidratación constante a través de aguas y zumos naturales en lugar de refrescos azucarados. Cabe destacar que, según la Red Europea para la Promoción de la Salud en el Trabajo, por cada euro que se invierte en salud se obtienen entre 2,5 y 4,8 euros de beneficio, pudiendo reducirse el absentismo laboral hasta en un 36%.
- Desayuno, siempre: Concienciar a los trabajadores de que nunca se salten el desayuno es clave, tanto para afrontar el gasto energético de la mañana como para evitar el consumo de comida chatarra. A media mañana, que dispongan de refrigerios saludables como la fruta fresca y puedan estirar las piernas, descansar o realizar alguna actividad física como el yoga, recargará sus pilas.
- Deporte como sello corporativo: Además de seguro médico o formación, es fundamental adaptar el propio espacio de la oficina para favorecer la salud de los empleados. Contar con un gimnasio corporativo, apostar por los espacios abiertos con luz natural, introducir zonas verdes o prácticas de huerting o tener un espacio para la meditación y el relax son algunas posibilidades a las que ya recurren grandes compañías de la talla de Google o Facebook. También puedes incluir el deporte en el programa de incentivos de la compañía.
- Exposición a la naturaleza: Caminar por un entorno natural reduce las posibilidades de padecer ansiedad y depresión y mejora el estado de ánimo y el bienestar físico, según revelan investigaciones como este estudio a gran escala. Por otro lado, exponerse a más luz natural incrementa los niveles de vitamina D, mientras que el contacto con la naturaleza reduce el riesgo de padecer enfermedades como la obesidad, la diabetes y el cáncer. También baja la emisión del cortisol, conocido como hormona del estrés.
Y tú, ¿conoces más iniciativas y consejos de alimentación saludable en la oficina? Puedes leer más sobre la salud laboral en nuestro artículo 4 Consejos para mejorar la salud laboral.